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Consejos


   28/11/2023


Colirio ciclopléjico ¿Qué es y cuándo debemos usarlo?



El colirio ciclopléjico son unas gotas que se utilizan en las consultas de oftalmología para distintos fines, según el caso de cada paciente. Principalmente sirven para poder explorar el fondo del ojo. 

 

También se le atribuye capacidad analgésica en procesos inflamatarios o en traumatismos oculares. Si quieres saber más sobre los usos de este colirio en las consultas oftalmológicas te lo contamos en este post. 

 

¿Qué es el colirio ciclopléjico?

 

El colirio ciclopléjico, también conocido como midriático, es un fármaco que tiene como principio activo el ciclopentolato hidrocloruro que sirve para paralizar el músculo ciliar del ojo y, por tanto, la capacidad de enfoque del paciente.  Esta parálisis, a su vez,  produce el efecto de la dilatación de la pupila. 

 

Esta parálisis del músculo que produce la acomodación se llama cicloplejía. Por tanto, están paralizados los músculos que ayudan a ver cuando se cambia el enfoque de la visión de lejos a cerca. Esta condición en circusntancias normales suele ocurrir con más frecuencia en niños o adultos que acostumbran a pasar largos periodos frente a las pantallas y a luces artificiales al reducir la frecuencia del parpadeo. 

 

 

Existen dos grupos de este tipo de colirios: 

 

  • Colirio ciclopléjico anticolinérgico. 
  • Colirio ciclopléjico simpaticomimético: los de esta categoría ayudan a la dilatación de la pupila, gracias a la fenilefrina, sin perder el reflejo de acomodación.. 

 

que es un colirio cicloplejico

 

¿Para qué sirve el colirio ciclopléjico?

 

Los usos habituales en una consulta oftalmológica son en general los siguientes: 

 

Graduación

 

  Gracias a la acción de este colirio el oftalmologo podrá detectar los defectos refractivos tales como la miopía, la hipermetropía y el astigmatismo, así como la presbicia o vista cansada que tiene un paciente. 

 

Dilatación de pupila

 

 Aunque entra dentro de los colirios midriáticos, tal y como se ha explicado antes, esta consecuencia se produce como consecuencia en en primer lugar de la parálisis del músculo ciliar del ojo y cuyo resultado facilita la exploración al oftalmólogo para realizar un adecuado examen ocular del fondo del ojo (retina y nervio óptico). 

 

Parálisis de acomodación (cicloplejía)

 

Ayuda al oftalmólogo a descartar en su diagnóstico una parálisis de acomodación. Cuando se produce cicloplejía no es posible realizar la acomodación por lo que no contamos con la capacidad de enfoque de objetos cercanos y no los veremos nítidos. Esta condición suele producir dolores de cabeza. 

 

Traumatismos o inflamaciones del ojo

 

El colirio ciclopléjico ayuda a quitar el dolor en casos de golpes fuertes en el ojo o irritación ocular provocada por bacterias, virus, parásitos o ausencia de lágrima. Una dosis controlada de colirio ciclipléjico también puede ayudar a aliviar la inflamación del iris de nuestros ojos. 

 

 

 

¿Usos en oftalmología pediátrica?

 

El oftalmólogo pediátrico, suele requerir de colirios ciclopléjicos que paralicen la acomodación para poder graduar objetivamente al niño. 

 

Dependiendo de las características de cada niño el número de gotas que se instilan variará, así como el momento en que el paciente esté listo para ser graduado.  Suele tardar aproximadamente unos 10 minutos y el efecto máximo es al cabo de una hora. 

 

Gracias a su acción el especialista podrá ver la necesidad y potencia de los cristales de gafas que necesitará el niño. 

 

El uso de este colirio ciclopléjico en niños es habitual también para el tratamiento del ojo vago o ambliopía. En este caso se pone la dosis en el ojo bueno para dificultar la visión de este y favorecer la visión del ojo vago.

 

No obstante, en niños también se suele usar colirio de atropina ya que el efecto midriático es mayor y reduce el tiempo de cicloplejía o parálisis de acomodación en el paciente. 

 

 

¿Existen efectos secundarios?

 

Una vez instiladas las gotas en el ojo del paciente, el efecto de este colirio tiene una duración entre 30 y 60 minutos. Sin embargo, algunos síntomas pueden prolongarse hasta 24 horas tras su aplicación por lo que hay que tener en cuenta esta posible sintomatología: 

 

  • Sensación de ardor: es puntual y momentáneo. Se puede añadir una gota de anestesia antes de las gotas ciclopléjicas para minimizar el picor que el paciente pueda sentir. 
  • Fotofobia: el paciente puede notar sensibilidad a la puz que desaparece gradualmente con la recuperación de la pupila. Se aconseja evitar actividades al exterior durante los días que dure la cicloplejía. 
  • Visión borrosa: leve dificultad de enfoque, especialmente objetos cercanos, durante las primeras 24 horas. Por ello, se aconseja evitar conducir con la pupila dilatada. 
  • En casos muy raros, se puede experimentar fiebre, sequedad de boca, enrojecimiento facial o alguna reacción alérgica que produzca inflamación ocular. 

 

Ante cualquier duda, pida cita con su especialista oftalmólogo. 



Fuentes:

Vademecum - Colirios. 

 



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